60.000 euros al mes con esta membresía.
¿Sabes con qué rima Luis Monge Malo?
Con cabronazo.
También rima con otras cosas, pero vamos a centrarnos en eso.
Mira:
El tío dice que tiene a +400 personas pagándole 149€ al mes en su membresía. Seguro que miente, porque como todo el mundo sabe, eso es imposible.
Menudo cabronazo.
El tío no publica un curso cada semana, ni se dedica a gestionar una guardería en Telegram para niños que juegan a empresarios mayores, cuándo todo el mundo sabe que eso es exactamente lo que hay que hacer cuándo montas una membresía.
Menudo cabronazo.
El tío no se pasa el día en RRSS persiguiendo a clientes por DM y mendigando atención al primero que le da un like, pero… ¿no es justo eso lo que contaban en ese curso de Instagram que hiciste?
Menudo cabronazo.
El tío tampoco dedica su jornada laboral a arreglar WordPress, pelearse con los plugins ni decidir cada día qué nueva herramienta de email marketing utilizará para comunicarse con su audiencia. Quizás eso tenga algo que ver con los 60K… pero mira, da igual.
Menudo cabronazo.
Y, hablando de emails, va el capullo y escribe un email de venta todos los días, cuándo todo el mundo sabe que eso es algo que nunca hay que hacer, porque tu audiencia no tiene cerebro y se ofende si le escribes a diario. De eso estoy seguro.
Menudo cabronazo.
No se entiende, ni se explica, ni se razona que alguien pueda estar facturando más de sesenta mil al mes con una membresía, haciendo justo todo lo contrario que los expertos del marketing, esos a los que casi todo el mundo sigue, dicen que hay que hacer para facturar mil euros al mes con una membresía.
Ojo, que quizás el problema sea ese.
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