Cómo salir de la pobreza mental
[Aviso que el email de hoy viene calentito.
Lo digo para los que lo mismo prefieren borrarlo y continuar lamiéndose las heridas.
O lo que sea que tengan que lamer hoy.]
A ver.
Hay algo peor que ser pobre:
Tener mentalidad de pobre.
Esto es así porque de pobre se puede salir de forma razonablemente sencilla.
Sin embargo, de la mentalidad de pobre es más complicado salir que de un pais comunista en pleno siglo XXI.
Bien.
Esto que diré ahora es muy posible que irrite a emprendepobres acomplejados:
Es importante hablar de dinero.
De cómo ganar dinero.
Cantidades extremas de dinero online sin vender humo ni vender a tus hijos a la mafia o al socialismo, que como todo el mundo sabe, son lo mismo.
Conseguirlo es posible y altamente recomendable.
Sin embargo, eso es algo que al emprendepobre medio español lo le entra en la cabeza porque solo ha conocido escasez neuronal e indigencia mental.
Es lo que hay.
De lo contrario, no se explica que alguien se autoboicotee hasta el punto de no apostar por el mejor modelo de negocio online que existe con el único argumento de que el el mundillo de las membresías está saturado.
Mis cojones están saturados.
Y lo que también está saturado es el cerebro emprendepobre de tantos Doritos que come pringando el teclado del móvil mientras envidia al que triunfa solo porque tomó la decisión correcta.
Porque dentro de mi membresía tengo suscriptores con negocios jóvenes que ganan en un mes bastante más que la media nacional en un año.
Y no son robots ni seres de luz tocados por la varita de la omnipotencia.
Son personas normales, como tú y cómo yo, que viven, aman follan y mueren.
No sé si me explico.
Bueno, otro día hablaré más sobre emprendepobres, un sustantivo que bien podría ser adjetivo.
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