Lecciones de venta sobre Membership Sites que aprendes en la peluquería
Tengo el pelo fino y rubio.
Tenerlo rubio me gusta.
Tenerlo fino no.
Es una putada, porque con lo bonito que es, el hecho de que sea tan fino limita mucho las posibilidades creativo-artísticas que puedo aplicar a mis peinados.
Eso y una cierta escasez en su densidad, no me lo ponen fácil.
En fin, problemas del siglo XXI.
El tema es que el otro día fui a la peluquería.
Siempre me lo corto igual, cortito y simple. Que no dé problemas ni demasiado trabajo.
El tipo que me lo corta conoce las limitaciones creativo-artísticas de mi pelo y tampoco se complica.
Un poco de máquina por aquí, escalado por allá, tijeras por arriba y listos.
Al cabo de 45 minutos, salgo de ahí pareciendo una persona decente y con 27€ menos en el bolsillo.
Bien.
Cuándo voy a un negocio, siempre me pregunto si le irá bien, o qué acciones llevarán a cabo para captar y retener a sus clientes.
En el caso de mi peluquería, tiene pinta de que les va genial, ya que siempre está llena.
Sin embargo, en mi opinión no solicitada del día, te diré que creo que les podría ir mucho mejor.
No un poco mejor.
Mucho mejor.
Una peluquería es, por definición, un negocio de recurrencia.
Vas todos los meses a cortarte el pelo. No hay más, tienes que ir. De lo contrario, quizás no te dejan entrar en casa.
Vas, y punto.
Entonces, ¿por qué no transformar la peluquería en una membresía de servicio presencial?
Esto es, pago automatizado y recurrente y sistema de reservas 100% online.
Nada de llamar para reservar y pagar con billetes sucios y arrugados.
Pago y reservas online.
¿Qué ganamos con eso?
Por supuesto, un flujo de ingresos recurrentes. Da igual si el cliente se deja caer por la peluquería ese mes o se le olvida.
El gerente de la peluquería cobra igual.
Eso soluciona uno de los principales problemas de los negocios basados la reserva de horas, ya que en muchas ocasiones, el servicio se cancela o los clientes no se presentan y aquí no cobra ni el tato.
Con un buen sistema de pagos online recurrentes, no sé si prestarás el servicio. Pero cobrar, cobrarás.
Así pues, si tienes un negocio recurrente en su fondo, pero todavía no en su forma, mi newsletter casi seguro que te interesa: