Mi mayor aprendizaje del año (mira a ver si te sirve).
Cuándo tienes un negocio sólido y pretendes escalar a lo bestia, pasa una cosa.
Pasa que muchas veces, tú solo no eres capaz de conseguirlo.
Y no es porque seas tonto, ministro o hater pichacorta.
Es porque estás metido dentro de tu negocio.
Para avanzar, necesitas una mirada externa.
Alguien, con cero implicación emocional, que solo atienda a resultados y que abra las ventanas para que corra el aire.
Esa es una tarea que alguien metido hasta las trancas, no puede hacer.
Bueno, ¿por qué te cuento todo esto?
Pues para ponerte en contexto de lo que viene a continuación.
Dejarse acompañar es uno de mis mayores aprendizajes de este 2023.
Y tiene sentido.
Estoy convencido de que sin la ayuda de nuestro mentor, este año hubiera sido distinto.
Y no solo hablo de facturación.
Hablo, sobre todo, de la mentalidad necesaria para conseguir resultados.
Para conseguir ciertos resultados.
Porque, sin trabajar una mentalidad adecuada, es imposible llegar ahí.
Mira, hay algo que quiero que tengas claro desde ya.
Dejarse ayudar no es malo.
Ni aunque seas un buscavidas como yo.
El que nunca necesita ayuda. El que siempre se saca las castañas del fuego.
Aunque seas un tipo como yo…
Déjate ayudar, hazme caso. Eso no te hace menos, ni te hace dependiente.
Eso te hace un ser humano inteligente.
De hecho, te diré algo que quizás nadie te dijo antes:
Si contratas a un mentor que no tiene a un mentor, descarta a ese mentor.
Por cierto, tengo una lista de correo.
Todos los días le escribo un nuevo consejo de negocio que bien podría ser de pago.
En caso de querer recibirlos tú también, apúntate ahí abajo: