Mi opinión no solicitada sobre la independencia
Estoy completamente a favor de la independencia.
Un poco a favor, no. Completamente.
Y tú también deberías.
Dime qué prefieres:
1. Depender de un tercero para lograr tus objetivos, y tener que estar siempre mendigando, o
2. Ser autónomo y, por lo tanto, libre de decidir tu futuro según tus propias reglas.
A mí me parece obvio. Y, en realidad, a la mayor parte de emprendedores también.
¿Por qué, si no, decides mandar a paseo a tu jefe?
¿Por qué, si no, decides alejarte de un sueldo fijo a final de mes para montar tu propio proyecto?
¿Por qué, si no, renuncias a la comodidad de 14 pagas y ticket restaurant en busca de la libertad?
Y es que, precisamente, de eso hablamos cuándo hablamos de independencia.
De que tú, como profesional autónomo, emprendedor, empresario, llámalo como quieras, tengas a tu alcance las herramientas adecuadas que te permitan ser libre y conseguir tus objetivos sin depender de nadie.
De alguien, no. Sin depender de nadie.
Porque tú mismo te sobras y te bastas. Aunque a veces no lo sepas. Aunque a veces no lo creas.
Tú mismo te sobras y te bastas crear tu negocio de membresía y vivir dignamente de tu proyecto digital.
Entonces.
Si tú también estás a favor de la independencia, y quieres montar la mejor membresía para ti sin tener que dar explicaciones a nadie, tengo algo que quizás te interese:
Un newsletter diario en el que mando consejos para que lo consigas.
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