No tienes talento, ni falta que te hace
El talento está sobrevalorado.
Ojo, no digo que no sea importante. Digo que está bastante sobrevalorado.
Un poco no, bastante.
Nos han vendido que para triunfar en la vida o en los negocios, necesitas ser talentoso.
Necesitas haber nacido con un talento innato, que te permita sobresalir por encima del resto de los mortales.
Necesitas haber sido tocado por la varita mágica de la vida, cuya genética privilegiada te eleve a los altares de la perfección humana.
Y, sobre todo, nos han vendido que sin ese talento nunca llegarás a ser nada.
Nunca llegarás a ser nadie.
Vaya movida, ¿eh?
Pues mira, no.
Para tener una vida plena y disfrutarla tanto a nivel personal como profesional no necesitas para nada ser talentoso.
No necesitas ser especial o diferente del resto. Porque tú ya eres único.
Porque entre los miles de millones de personas del mundo, no hay ninguna como tú.
Lo que necesitas es un plan. Un sistema que te permita alcanzar tus objetivos vitales, sean estos los que sean.
Ojo, hablo de alcanzar tus objetivos. Los tuyos, no los del vecino o los del emprendedor que tiene una membresía al que tanto admiras.
O al que tanto odias precisamente por tenerla.
Tus objetivos.
Y si entre tus objetivos está crear un Membership Site profesional como base de tu negocio de membresía, no necesitas tener talento.
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