Tener empleados es peor que tener jefe
La frase no es mía. Se la leí en una ocasión al calvo carbón.
Precisamente este pasado fin de semana lo comentábamos tomando unas cañas.
E Isra es un gran ejemplo de cómo tener un negocio sólido, escalable y lucrativo sin la necesidad de atarte a contratos laborales más propios de la revolución bolchevique.
A ver, no me malinterpretes.
Nada en contra de que lances tu negocio sin saber cómo va a funcionar, montes una SL, alquiles oficinas y contrates a siete trabajadores.
Digo siete porque el siete convierte más como todo el mundo sabe.
Sin embargo, hay otros modelos.
Ni mejores ni peores.
Otros.
Yo soy partidario de comenzar lo más lean posible.
Sin SL
Sin oficinas.
Sin trabajadores.
Y solo si el negocio lo requiere, invertir en activos como en empleados.
El tema está en que en la inmensa mayoría de negocios de membresía eso no es necesario.
Y no lo es porque no existan tareas que puedas y debas delegar a un tercero.
No lo es porque el noble arte de delegar se puede practicar de otras muchas formas.
Si es que realmente lo necesitas.
Y claro.
La cuestión aquí es analizar si en tu caso es necesario.
Valorarlo bien, desde un punto de vista objetivo y racional.
Y hacerlo antes de que comiences a quemar tu dinero contratando personal cuándo en ningún caso lo necesitas.
Mira.
En el Club hablamos mucho sobre estos temas.
No hablamos sobre cómo hacerte rico de un día para otro comprando Bitcoin, NFTs o mierdas de estas que todavía no entiendo.
Hablamos mucho y bien sobre cuestiones fundamentales en tu día a día gestionando un negocio de suscripción.
¿Y sabes que es lo mejor?
Que hablar nos lleva a tomar acción.
Compartir nos permite llegar a conclusiones seguras y accionables de forma inmediata en nuestros negocios.
Vaya, todo lo contrario de lo que sacas metido en trece grupos de Telegram o en veinticinco grupos privados de Facebook.
Bueno, si te interesa este rollo, entra en mi lista de correo gratis ahora: